Tras un profundo análisis de los consumos energéticos de Olarra, de las necesidades a cubrir y otras consideraciones técnicas como el espacio disponible, la orientación apropiada para los paneles o las pérdidas de luz que podría ocasionar la generación de sombras, se concretaron las características de la obra.
La instalación está formada por 5.428 módulos en total, convirtiéndose así en la instalación solar fotovoltaica en cubierta más grande del País Vasco en el momento de su ejecución. La obra se realizó en 3 fases diferentes. En la primera y la segunda fase se instalaron 4.572 módulos fotovoltaicos JINKOSOLAR modelo JKM535M de 535 W de potencia pico. Sin embargo, en la tercera fase se instalaron 856 módulos fotovoltaicos JASOLAR modelo JAM72S30 de 540 W de potencia pico. La potencia total pico de la instalación fotovoltaica es de 2,9 MWp y es capaz de generar 2.954.168 kWh anuales lo que supone un aprovechamiento del autoconsumo de un 96%.
La principal dificultad afrontada en el proyecto fue la solicitud de aprobación de AESA para poder llevar a cabo la instalación. Al ser algo imprevisto, supuso un contratiempo en la planificación de inicio de la obra. Por otro lado, la subida del material a las cubiertas del edificio también resultó un problema. La nave en la que se realizó la instalación es antigua y no se pudo descargar el material en cualquier lugar de la cubierta. Además, el tener que distribuir el material a lo largo de esta, así como utilizar el arnés en todo el proceso de instalación multiplicaron exponencialmente la complejidad de la operación, por lo que se tardó más tiempo de lo previsto en llevar a cabo el proyecto.